Igor Stravinsky creó «L’Histoire du soldat» en Suiza, donde se refugió cuando estalló la Primera Guerra Mundial y alargó su exilio durante la Revolución Rusa. El compositor ruso se alió con el poeta suizo Charles Ferdinand Ramuz con el objetivo de representar una obra que pudiera realizarse con pocos medios y pudiera tener un carácter itinerante sin que presentara problemas técnicos: Seis instrumentos más percusión , reducido número de actores y una bailarina, le permitían alejarse de otras concepciones dramatúrgicas wagnerianas. En realidad, no es ni un ballet, ni tiene cabida dentro de las convenciones del teatro musical; Stravinsky crea un nuevo género de teatro de cámara, dominado por la regla de la interdisciplina. Música, teatro y danza conviven en el mismo espectáculo. Nosotros, siguiendo este espíritu artístico, hemos querido incorporar otra disciplina: la pintura. En aquella época de grandes limitaciones económicas y creativas donde coincidieron músicos, pintores y otros artistas de muchos países que huían del horror de la guerra, situamos la acción en el estudio de un artista plástico que intenta plasmar en un lienzo la bien conocida historia arquetípica de Fausto: el hombre que renuncia a su alma a cambio de bienes materiales y la conquista de lo desconocido. En el fondo, no deja de ser una metáfora profética de la existencia del propio Stravinsky: la historia del soldado desertor es también la condena del músico exiliado, destinado a la pérdida de su patria y con ella, sus raíces y tradiciones. Consciente o inconscientemente todo artista también acaba enfrentándose a sus temores y sus propios demonios con sus obras. El soldado tiene por primera vez a alguien que le acompaña en su recorrido: el espíritu de su creador. Como esa primera vez.
Música
Igor Stravinsky
Texto
Charles F. Ramuz
Adaptación al catalán
Miquel Desclot
Dirección Musical
Carles Miró
Dirección Escénica
Martí Torras Mayneris
Intérpretes
Albert Ausellé – soldado
Joan Maria Segura – narrador y diablo
Grup Eklecson
Sergi Claret, violín
Matthew Simon, corneta de pistones
Salvador Soler, percusión
Carles Pertegaz, clarinete
Alejandro Ferreira, fagot
Emili Bayarri, trombón
Cristina Membrive, contrabajo
Pintura en directo
Martí Torras Mayneris
Vestuario
Iris Cortavitarte